Que la transformación digital va rápido y las organizaciones necesitan actualizarse es un hecho. ¿Sabías que el 70 % de los ejecutivos empresariales cree que existe una brecha de habilidades importante en sus equipos de trabajo? En este sentido, las estrategias de reskilling y upskilling toman más importancia que nunca.
¿Qué es el reskilling y el upskilling?
El reskilling hace referencia a la capacitación de los empleados en nuevas competencias y habilidades que les permitan desempeñar roles diferentes dentro de la empresa. Este proceso es muy útil, sobre todo, cuando un puesto queda obsoleto por los avances tecnológicos o la automatización, por ejemplo.
Por otro lado, el upskilling se centra en mejorar las habilidades actuales del equipo para que puedan desempeñar sus funciones de forma más eficiente. En lugar de cambiar de rol, el trabajador se forma en áreas complementarias que le permiten ser más eficiente y productivo en su puesto.
¿Cuál es la diferencia entre reskilling y upskilling?
La principal distinción la encontramos en el enfoque de cada uno. Mientras que el reskilling se centra en formar a un empleado para que asuma un nuevo rol, el upskilling se basa en mejorar las capacidades dentro del rol actual.
Ambas estrategias resultan muy útiles para retener y atraer talento y fomentar el desarrollo profesional del equipo para que se adapte mejor a los cambios del mercado laboral.
Ventajas de aplicar reskilling y upskilling
- Mejora de la productividad. La agilidad de aprendizaje es fundamental para adquirir nuevas habilidades y realizar las tareas de forma más eficiente.
- Retención de talento. Ponte en el lugar de tu equipo. Si tu empresa te ofreciera oportunidades de crecer, es probable que sintieras una mayor motivación para permanecer en la organización.
- Capacidad de adaptación. En un entorno en constante cambio y marcado por la incertidumbre, contar con un equipo flexible que pueda asumir nuevas funciones o mejorar las actuales resulta positivo.
- Ahorra costes de contratación. El reskilling precisa de inversión, pero suele ser menor que contratar a un nuevo empleado. Sobre todo, si buscas talento especializado para funciones específicas.
Upskilling y reskilling: ejemplos de sectores donde aplicarlo
Estas dos técnicas funcionan bien en nichos o sectores que evolucionan rápido:
- Big data y análisis de datos.
- Inteligencia artificial y aprendizaje automático.
- Ciberseguridad.
- Automatización y robótica.
- Desarrollo de software.
- Energías renovables.
- Cloud computing.
La brecha de habilidades (también conocida como skill gaps) dificulta que tu empresa alcance los objetivos estratégicos. Con la herramienta de KTI diseñamos planes personalizados a partir de un reskilling de formación con ayuda de la IA.
